VOLVER A LA ESCUELA PRIMARIA, LA Nº 8;


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martes, 12 de marzo de 2013

Peluquería y moda para escolares




Las niñas de esos años ´60  tenían una amplia gama de recursos para arreglar su pelo.

Sin duda alentadas por el modelo de las famosas "divas" de esos años, podían lucir en sus cabellos: vinchas, cintas, ajustados rodetes o prolijísimos flequillos...




A las pruebas nos remitimos


Con VINCHA de riguroso stretch
como "la Cardinale"
VINCHA de stretch
característica
de esos años




Con prolijísimo FLEQUILLO
como la hermosa Audry






De apretado RODETE
como la esplendorosa Elizabeth



CINTAS DE RASO
para el pelo
Con variadas TRENZAS, 
COLITAS Y LAZOS
como la joven Brigitte 
















Algunas con un cabello
DESPEINADO  o CASUAL
como el de la sugestiva Sofía







Los varoncitos en cambio no tenían muchas opciones a la hora de ir a la peluquería.

Usaban irremediablemente
el pelo corto

Riguroso.


Los Beatles apenas llegaban a imponer moda y nuevas costumbres . . .  y en esos años eran tan solo unos "flequilludos".




Sin embargo la moda se expresaba en los niños   a través de accesorios como los moños y las corbatas, que lograban sobresalir del guardapolvo. 




Niños de la escuela 8
 de comienzos de los ´60
con MOÑOS de
diferentes modelos







Era todo un arte para las familias saber hacer el nudo de una corbata  y transmitir sus secretos a las nuevas generaciones. 






Alumnos de la escuela 8
en los comienzos de los ´60
con sus infaltables
CORBATAS




Claro que no siempre era fácil mantenerla intacta después de un buen -o mal-  recreo con los compañeros. 





Un tema aparte lo constituían  los días en que se debía asistir a alguna "ceremonia o acto escolar".
Esa sí que era una ocasión especial ya que requería un cierto protocolo.  Nuestras madres se ocupaban de cumplimentarlo  con esmero y algo de stress  -o  "nervios" como se decía entonces-.
Los puntos básicos del protocolo eran:

  • guardapolvo blanqueado y almidonado
  • guantes blancos
  • medias blancas, azules o marrones
  • zapatos brillantemente lustrados (blancos para las niñas y negros o marrones,  para los niños)
  • cabello impecablemente peinado
  • todo recién lavado y planchado ó lustrado 
  • el niño o niña bañado, peinado y perfumado 
  • escarapela al pecho
    y . . . 
  • paciencia infinita 



Si  el niño o niña debían usar traje especial, este tenía que estar impecable y listo para vestir. 




Ni hablar si quien asistía al acto debía ser abanderado o escolta de bandera porque todo lo antedicho debía acompañarse con el calificativo de "ejemplar, modelo". 








Pero de este asunto nos ocuparemos en próximas entradas







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